miércoles, 19 de mayo de 2010

Llegan los robots de ADN

Arañas moleculares que pueden fabricar productos en una cadena de montaje


Los robots de ADN, moléculas con patas de esta cadena química, base de la vida, y que se mueven de un lugar a otro, son ya una realidad. Se presentan en Nature dos tipos de estas máquinas moleculares, que funcionan trasladándose de un punto de enlace biológico a otro sobre una superficie también recubierta de ADN.
El primero es una araña molecular de tres patas que puede actuar autónomamente según las claves que le suministre el ambiente por el que se mueve. Las patas de la araña son enzimas de ADN, que pueden dividir una secuencia determinada en un sustrato de ADN al estilo origami. Así con capaces de ejecutar secuencialmente acciones tales como arrancar, continuar, girar o parar, rompiendo una secuencia y pasando a la siguiente que encuentran en su camino. Cuando llega a una secuencia que no puede romper el robot se para. Esta máquina ha llegado a recorrer hasta 100 nanómetros (milmillonésimas de metro), lo que representa unas 50 divisiones.
Aunque su desarrollo presenta dificultades, estos robots tienen la ventaja de ser programables, de que se puede predecir su comportamiento biofísico y de que pueden interactuar con paisajes diseñados a voluntad, recalca el amplio equipo de investigadores estadounidenses que ha realizado el trabajo, liderados por la Universidad de Arizona.
Otro modelo es una cadena de montaje a escala nanométrica en la que los robots se mueven también sobre un sustrato de ADN tipo origami y pasan por una serie de máquinas programables que les suministran la mercancía (nanopartículas de oro). Los robots andadores tienen cuatro piernas (una de las cuales se enlaza a cada máquina cuando llega a ella), y tres manos para coger la mercancía. La cadena de montaje es de tres máquinas, cada una de las cuales da, o no da, según su programación, una mercancía distinta al andador. Así se pueden fabricar de forma controlada ocho productos distintos. Esta cadena de montaje, desarrollada por científicos chinos y estadounidenses, representa un hito en la nanotecnología con ADN, asegura Lloyd Smith, químico de la Universidad de Wisconsin, en la misma revista.


martes, 18 de mayo de 2010

Hitler escapó a Argentina en 1945, según un libro


El periodista Abel Basti asegura que huyó desde Austria y España. La operación habría contado con la aprobación de Estados Unidos.



Tras huir entre las cenizas de un Berlín envuelto en llamas y antes de partir hacia la Patagonia argentina con Eva Braun, Adolf Hitler permaneció oculto en España varios días de 1945, asegura el periodista bonaerense Abel Basti en su libro 'El exilio de Hitler'.
La mayor revelación de este libro de reciente publicación en Argentina y que en junio saldrá a la venta en el mercado español, es un documento secreto alemán conseguido por el autor en su país y en el que el Führer aparece como uno de los pasajeros evacuados en un avión de Austria a Barcelona el 26 de abril de 1945.
Según la historia oficial, el líder del Tercer Reich renunció a escaparse de Berlín y el 30 de abril de 1945 se suicidó junto a su amante, Eva Braun, en el búnker construido bajo el edificio de la Cancillería, aunque sus cuerpos, incinerados, nunca fueron hallados.
Basti, que hace años intenta reconstruir el derrotero de los nazis en Argentina, considera esta versión una "farsa" que se "fabricó" para dar un salvoconducto a Hitler, quien era visto como una "pieza clave" en la lucha contra el comunismo en la posguerra.
"No tengo dudas de que cuando concluía la Segunda Guerra Mundial Hitler se escapó de Alemania bajo un escudo protector de sectores de poder anglo-norteamericanos, los mismos que lo habían financiado para que, de humilde pintor, llegara a ser canciller de Alemania", asegura el periodista. Incluso habla de la existencia de un supuesto pacto Washington-Berlín que contemplaba un plan de evacuación nazi para personas, tecnología, documentos y divisas.
Para Basti, el "gran secreto" de la huida de Hitler fue la llegada de uno de sus dobles al búnker, que "tuvo ribetes dignos de una película de Hollywood" y ocurrió "al atardecer del 22 de abril de 1945".
"Ese día el verdadero Hitler voló hacia el aeropuerto austríaco de Hörsching, cercano a la ciudad de Linz, con ocho personas, entre ellas Eva Braun", precisa, y subraya la coincidencia de esta versión con el testimonio de Heinrich Müller, jefe de la Gestapo, durante un interrogatorio de la CIA.
El periodista argentino sostiene que Hitler y su comitiva estuvieron cuatro días en Austria y se refiere a un hecho que considera una suerte de "pago por inmunidad": el abandono en Linz de un tren repleto de oro robado a Hungría por los nazis. "Más que una llamativa coincidencia, da la sensación de que se trató de una entrega pactada", subraya.
Al igual que Müller, que reveló a la CIA que el Führer se había escapado a España, Abel Basti sostiene que Hitler partió hacia Barcelona el 26 de abril.
Vuelo a Barcelona
En ese sentido, publica en su libro una comunicación oficial secreta según la cual Hitler encabeza la lista de pasajeros de un avión que viajó de Hörsching a Barcelona pilotado por Werner Baumbach, fallecido en Argentina en 1953.
"La presencia de Hitler en España me la confirmó un hoy anciano sacerdote jesuita, cuya familia era amiga del jefe nazi. Y también tengo testimonios que aluden a reuniones que mantenía con su séquito en una hostería llamada 'Las Quebrantas', en Cantabria", afirma.
El libro incluye además un documento de los servicios secretos británicos que revela que "un convoy de submarinos nazis partió días más tarde de España y, tras una escala técnica en las islas Canarias, continuó su periplo hacia el sur argentino", con la anuencia de Estados Unidos.
"En uno de esos submarinos viajaban Hitler y Eva Braun", enfatiza Basti, convencido de que la pareja desembarcó en la Patagonia entre julio y agosto de 1945, al amparo del presidente de facto Edelmiro Farrell y de Juan Domingo Perón, entonces su ministro de Guerra.
"El escape de Hitler fue exitoso. De esa manera se pudieron poner a resguardo de los comunistas el capital y los hombres. Después de ejecutada la fuga, y mientras se hacían todo tipo de conjeturas respecto a su suerte, el Führer ya podía dormir tranquilo en un alejado país suramericano llamado Argentina", concluye.



viernes, 14 de mayo de 2010

El calentamiento global acaba con los lagartos


¿Para qué sirven las lagartijas? Es algo que tendremos que empezar a preguntarnos, pues dentro de poco no las tendremos a mano. Como si fuera una señal de alarma de que algo no marcha bien en los ecosistemas, los científicos han descubierto que lagartos y lagartijas de todas las regiones del planeta están desapareciendo. Lo hacen incluso en zonas que no han sufrido alteraciones de ningún tipo y donde en teoría no tendría que haber motivos para que hubiera una desaparición tan drástica y rápida de esta fauna.


La revista 'Science' publica el resultado de una investigación llevada a cabo por 26 científicos de 12 países que han constatado la situación de emergencia que viven los reptiles. Puesto que no son capaces de regular por ellos mismos su temperatura corporal, como hacemos los mamíferos, dependen totalmente de la temperatura exterior para entrar en calor. De este modo, son extremadamente sensibles a las variaciones de teperatura. Y están notando ya los cambios que ha sufrido el clima del planeta.
"Muchas especies ya están al borde de la extinción. Sospechamos que muchos lagartos ya se han extinguido en los trópicos, pero ni siquiera sabemos cuántas especies han desaparecido ya", ha asegurado al servicio de noticias científicas SINC Barry Sinervo, autor principal del estudio, e investigador en la Universidad de California en Santa Cruz (EEUU) y del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS, en sus siglas en francés) de Francia.
Según Ignacio De la Riva, otro de los autores e investigador en el Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC), "el estudio es un poco sombrío" porque para 2050 "no hay esperanza" para los lagartos. Los científicos pronostican que para 2050, el 6% de las especies de lagartos (y el 16% de las poblaciones) se habrá extinguido. Para 2080, "si no se revierte el calentamiento global", la tendencia no mejorará: el 20% de las especies (y el 30% de las poblaciones) se extinguirá.
Desapariciones en Europa
La investigación se ha presentado en rueda de prensa en Madrid por Barry Sinervo, Ignacio De la Riva y Jean Clobert, investigador del CNRS, en el marco del congreso Media For Science Forum organizado por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT).
Los autores han explicado que todo partió de un estudio sobre una especie de lagartija de Europa, cuando se constató que ciertas poblaciones de lagartija de turbera ('Zootoca vivipara') de Francia se habían extinguido. Igualmente, miembros del equipo comprobaron la desaparición fulgurante de varias poblaciones de 48 especies de lagartijas mexicanas del género Sceloporus.
Estos hallazgos llevaron al grupo a desarrollar un modelo artificial de lagarto con microchips que medía la temperatura operativa en diferentes condiciones durante cuatro meses, tanto en localidades donde las poblaciones de estos reptiles habían sobrevivido como en aquellas donde habían desaparecido. Los resultados de la prueba fueron concluyentes: en los lugares donde se habían producido extinciones, los lagartos no habrían tenido tiempo de alimentarse ni de reproducirse adecuadamente, ya que las altas temperaturas les obligarían a permanecer la mayor parte del tiempo guarecidos en sus refugios.
Además, el estudio señala que algunas especies sí son capaces de adaptarse a los cambios de temperatura, pero lo que no pueden resistir es la presión que ejercen sobre ellas otros especies que huyen de sus zonas habituales. Enfrentadas a nuevos competidores, desaparecen.


viernes, 7 de mayo de 2010

Los humanos modernos comparten hasta un 4% de su ADN con los neandertales




El genoma del neandertal revela que la especie extinta se cruzó con el 'sapiens'. Los africanos subsaharianos son los únicos que no tienen su material genético. La diferencia entre ambas especies está únicamente en 83 genes





Un equipo internacional de científicos ha revelado que la especie humana extinta de origen europeo, los neandertales, y los 'Homo sapiens' modernos, de origen africano, tuvieron descendencia. El flujo genético entre ambas se extendió después, desde Oriente Medio, hacia el resto del planeta, a excepción de los africanos subsaharianos, los únicos que no tienen un pequeño porcentaje de ADN neandertal que tiene el resto de la Humanidad: entre un 1% y un 4%.
Esta es una de las conclusiones de la secuenciación de un 60% del genoma nuclear de los 'Homo neanderthalensis', cuyos últimos individuos desparecieron hace menos 28.000 años, posiblemente en el sur de la Península Ibérica, después de habitar en Eurasia durante cerca de 270.000 años.
La otra es que sólo hay 83 genes que nos diferencian de los desaparecidos, en los que estaría la clave del éxito evolutivo de nuestra especie.

Uno de los fósiles utilizados para extraer el ADN. SCIENCE
Hasta ahora no había pruebas concluyentes que indicaran que ambas especies habían tenido descendencia. En el ADN mitocondrial, que transmiten las mujeres, no había rastro de un posible cruce, pero había una teoría, defendida por algunos investigadores, que apostaba por esta posibilidad en Eurasia. Es la hipótesis de la multirregionalidad: en cada lugar, los humanos modernos habrían terminado absorbiendo genéticamente a otros humanos locales más primitivos.
La otra defendía que el 100% de los humanos actuales proceden de África y no hubo ningún tipo de flujo genético con otras especies de Homo que entonces habitaban la Tierra.
La secuenciación del genoma, un proyecto liderado por Svante Pääbo, del Instituto Max Planck de Alemania, ha sido posible gracias al hallazgo de secuencias genéticas en fósiles de neandertales de cuatro yacimientos europeos y viene a desmentir ambas posibilidades.
La fuente principal fue el situado en Vindija (Croacia), pero también ha sido fundamental la participación de los fósiles de la cueva El Sidrón, en Asturias.
Para poder comparar los datos dentro de un marco evolutivo, los investigadores utilizaron el genoma del chimpancé y el de cinco individuos actuales (un sudafricano de la étnica san, un yoruba africano, un chino, un francés y otro de Papúa-Nueva Guinea).
Fue así como se comprobó que todos los 'sapiens' modernos tienen entre un 1% y un 4% de material genético procedente de los neandertales, a excepción de los africanos. La explicación más lógica es que ambas especies se cruzaron y tuvieron descendencia cuando los 'sapiens' ya habían salido de África, hace unos 80.000 años, pero aún no se habían extendido por el resto del globo. De hecho, a Europa no llegaron hasta hace 40.000 años. Allí también estaban los neandertales, pero no hay constancia de que volvieran a cruzarse.
Los genes que nos distinguen
El estudio revela que de los 83 genes que nos diferencian, algunos son importantes porque sus mutaciones están relacionadas con el autismo, el síndrome de Down y la esquizofrenia; otros tienen que ver con cambios en la estructura ósea, sobre todo del cráneo, la clavícula y el tórax. Y hay muchos que no se sabe exactamente que proteína expresan, y por tanto cual es su función.
En el trabajo han participado tres científicos españoles que trabajan con los fósiles de El Sidrón: Carles Lalueza-Fox, experto en ADN antiguo del CSIC, el paleontólogo Antonio Rosas, del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC) y el arqueólogo de la Universidad de Oviedo Marcos de la Rasilla, investigador principal de la cueva de El Sidrón. También figuran como autores Javier Fortea, anterior director del proyecto de El Sidrón, fallecido el año pasado, y Tomás Marqués Bonet, que trabaja en el Departamento de Genómica de la Universidad de Washington.